jueves, 23 de septiembre de 2021

SE ACABÓ...



… el trabajo que empecé el día 04 de julio. Cuarenta y seis días de entrenamientos para poder afrontar con garantías (las mínimas) el Maratón de Madrid, mi Mapoma, ese que se tenía que haber celebrado el 26 de abril de 2020, y que las circunstancias obligaron a suspender.

Entrenamientos que me han resultado duros, no por su exigencia, sino porque he tenido que poner toda mi fuerza de voluntad para cumplir con ellos.

Hoy me gustaría escribir que llego a la cita del domingo pletórico, pero no puedo porque no es así; voy simplemente para terminar con el mínimo sufrimiento posible. Solo eso. ¡Ah!, pero la sonrisa de cruzar la meta no me la va a quitar nadie, porque esa si me va a estar esperando en meta.


1 comentario:

Francisco Manuel González Fernández dijo...

Seguro que resultó mejor de lo esperado , y por supuesto , no faltó la sonrisa