Hoy he estado tomando un largo café con mi vecino y amigo Anselmo, el tiempo estaba para eso, nada más; me dice que le gusta la nieve, también que es bueno que nieve y por qué no, que es bonito ver nevar, sobre todo cuando, como él, no tienes nada que hacer, y puedes disfrutar o jugar con ella.
Pero ¡ay!, continúa diciéndome, la cosa cambia si no te queda más remedio que salir a la calle para trabajar o para hacer compras, y tienes unos mandatarios municipales instalados en la demagogia, entonces sí que se complica la vida, además de jugársela, sobre todo las personas mayores.
Ha estado nevando desde el miércoles por la mañana hasta la madrugada del jueves, ha caído una nevada considerable, digna de la mejor estampa navideña, hoy estamos a viernes y la ciudad es un caos.
- ¿Cuántos operarios municipales has visto recomponiendo el caos?, me pregunta.
Pienso unos segundos, lo suficiente para que no repita la pregunta.
- He visto un par de brigadas municipales, compuesta de tres operarios cada una, sin embargo sí he visto a un montón de ciudadanos, pala en mano, limpiando las aceras o despejando paso de peatones, le respondo.
- Sí señor, dando ejemplo de civismo, eso es digno de mención.
- Por eso lo menciono, ¿no?.
No calla, está lanzado, y a pesar de que hace un rato echó el azúcar sigue dando vueltas al café.
- Y ¿qué me dices de los responsables municipales? Desaparecidos, no sé dónde se han metido durante este tiempo, quizás ya de vacaciones de navidad, o quizás enzarzados en alguna discusión inútil que nada importe al ciudadano. Claro, los problemas para transitar por la ciudad ya se solucionarán cuando se derrita la nieve (dentro de quince días) o echándonos la culpa por salir de casa”.
- Ya, ellos son así.
- ¿Sabes qué frases son las que más he oído estos días?, vuelve a preguntarme.
- No, le contesto.
- Dónde está el Ayuntamiento, sólo nos quieren para pagar, no hay derecho, no tienen vergüenza.
- ¡¡!!
- Llevo dos días que parece que voy por la calle pisando huevos.
- Pues ten cuidado no pilles alguna liebre.
- Sólo me faltaba eso, replica.
Quizás mi amigo tenga razón, pero desgraciadamente eso no va a hacer que las cosas cambien, quizás si hubiesen estado las elecciones cerca...
Pero ¡ay!, continúa diciéndome, la cosa cambia si no te queda más remedio que salir a la calle para trabajar o para hacer compras, y tienes unos mandatarios municipales instalados en la demagogia, entonces sí que se complica la vida, además de jugársela, sobre todo las personas mayores.
Ha estado nevando desde el miércoles por la mañana hasta la madrugada del jueves, ha caído una nevada considerable, digna de la mejor estampa navideña, hoy estamos a viernes y la ciudad es un caos.
- ¿Cuántos operarios municipales has visto recomponiendo el caos?, me pregunta.
Pienso unos segundos, lo suficiente para que no repita la pregunta.
- He visto un par de brigadas municipales, compuesta de tres operarios cada una, sin embargo sí he visto a un montón de ciudadanos, pala en mano, limpiando las aceras o despejando paso de peatones, le respondo.
- Sí señor, dando ejemplo de civismo, eso es digno de mención.
- Por eso lo menciono, ¿no?.
No calla, está lanzado, y a pesar de que hace un rato echó el azúcar sigue dando vueltas al café.
- Y ¿qué me dices de los responsables municipales? Desaparecidos, no sé dónde se han metido durante este tiempo, quizás ya de vacaciones de navidad, o quizás enzarzados en alguna discusión inútil que nada importe al ciudadano. Claro, los problemas para transitar por la ciudad ya se solucionarán cuando se derrita la nieve (dentro de quince días) o echándonos la culpa por salir de casa”.
- Ya, ellos son así.
- ¿Sabes qué frases son las que más he oído estos días?, vuelve a preguntarme.
- No, le contesto.
- Dónde está el Ayuntamiento, sólo nos quieren para pagar, no hay derecho, no tienen vergüenza.
- ¡¡!!
- Llevo dos días que parece que voy por la calle pisando huevos.
- Pues ten cuidado no pilles alguna liebre.
- Sólo me faltaba eso, replica.
Quizás mi amigo tenga razón, pero desgraciadamente eso no va a hacer que las cosas cambien, quizás si hubiesen estado las elecciones cerca...
Foto de Mauricio Peña (La Crónica de León)
12 comentarios:
Que bonita es la nieve cuando se ve desde la ventana... a mi no me gusta nada en "directo". Ya sabes, cuidado con los resbalones y entrena con prudencia
un abrazo
Ver nevar, contemplar un paisaje nevado es bonito. Es beneficioso para el campo y/o la naturaleza. Pero para la circulación, peatones,... un peligro, y si hiela... ni te cuento. Mi padre, el año pasado, rompió el peroné de la pierna izquierda al resbalar. Fue en el pueblo, y bueno. Pero en las ciudades, no se tendrían que permitir los caos que se forman.
Un saludo.
Precioso el paisaje y la ciudad nevada, y más en Navidad, aunque sea pisando huevos.
Feliz Navidad, amigo Saturnino
Bonita estampa la que produce la nieve. Ahora es buena época para hacer brazos quitando nieve, aprovecha que luego se nota en la carrea a pie.
Un saludo.
Desde las estupendas vistas que tengo desde casa, a dos días ya de la nevada, el paisaje sigue siendo el mismo: blancura absoluta, pero nada idílica, sino peligrosa: hielo puro. Sólo he visto a tres operarios quitando el hielo y abriendo caminitos en las aceras, para que pasemos de uno en uno, eso sí, picando y a palazo limpio, como bien corresponde a un país "civilizado" como el nuestro.
Un beso!
Lo de las "autoridades" municipales querido amigo es otra historia de la que algún día hablaré no tienen desperdicio...
Desde luego no tiene ni un ápice de sentido común el que se encargue de la movilidad o de la seguridad ciudadana de vuestra ciudad, claro que a lo mejor lo que no tiene es ni "un euro"... Habrá que cantarles aquello de "dónde están las llaves" en versión monetaria...
Un saludo.
En Madrid cayó nieve el otro día. Mientras desayunaba el techo de los coches se quedó con una capita fina blanca, también las aceras, lo suficiente para no arriesgar a llevar la bici. Cuando volví de trabajar ya no quedaba nada, claro, pero todos los pasos de peatones de mi barrio (Chamberí)estaban repletos de sal. Es verdad que aquí no nieva ni hiela como en León, pero la falta de previsión y de medios en una ciudad a más de 800 metros de altitud es algo bastante lamentable. He oído que ni los autobuses urbanos podían circular, vaya caos.
Hoy me has sorprendido, normalmente te doy un pequeño recorte para que hagas una entrada, algunas veces la haces y otras, las menos, no lo haces, pero en esta ocasión lo has hecho, eso quiero decir que estas de acuerdo conmigo ¿eh?.
Un saludo.
Id quitando el hielo para cuando vayamos en Navidad. Que no quede nada. Y de paso os podéis llevar el frío. Hasta pronto.
Yo que no he visto más nieve que la que sale en la tele... aún me emciono cuando veo a lo lejos algún pico de montaña nevado. No me importaría que cayera la que os cayó en la puerta de mi casa.
El problema no es la nieve, sino la rutina y el hartazgo.
Pasadlo lo mejor que se pueda!
Ya está todo dicho y no voy a repetirme, pero no puedo resistirme, la comparación del campo de futbol limpiado con el esfuerzo de presos de Masnsilla y el caos de la calle unido a la desidia del ayuntamiento es imperdonable, y se me antoja hasta tercermundista. Pero so se preocupen señores, que luego sacamos pecho rápidamente cuando hablamos de León.
Saludos y paciencia.
Jan: De momento nos mantenemos en pie; y los entrenamientos un poco abandonados, pero vamos cogiendo otra vez el ritmo.
Un fondista de Doney: La nieve deja un bonito paisaje, pero nuestros dirigentes municipales deberían acondicionar la ciudad para que el ciudadano la disfrute.
Trapatroles: Gracias e igualmente que disfrutes de estas fiestas navideñas.
biciatleta25: No sé si haremos mucho brazo, pero piernas seguro, jeje.
SONIA: Reflexionare sobre lo de civilizado.
Abe: No tendrán euros, pero creo que me cobran buenos impuestos, así que deberían tener un poco más en cuenta a los que los pagamos.
Tecolinha: Aquí no ha habido ni sal, ni previsión, lo único una bonita estampa.
Anselmo: Yo siempre estoy de acuerdo contigo, bueno casi siempre, jeje, que después se te sube el ego.
Mariano: La nieve no la quite la naturaleza, no la quita ni Dios.
Jordi Xano: No es cuestión de hartazgo, no, que la nieve nos gusta, pero por esa nieve no se puede parar una ciudad, ni arriesgar la integridad física de sus ciudadanos. Hoy he salido a correr y por los alrededores de León esta todo nevado, y gente disfrutando de ella, la fotografía preciosa.
Crazysoul: Mucha paciencia amigo.
Un beso para ellas y un abrazo para ellos.
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