miércoles, 12 de febrero de 2014

Maratona di Roma: 6ª semana

Del 03 al 09 de febrero
Los pequeños detalles empiezan a tener importancia; los descansos, las sensaciones, ese pinchazo o esa molestia que me lleva al automasaje, la alimentación, el apoyo incondicional de los míos. Pequeñas cosas que van allanando el camino. Todo vale para seguir con la exigencia que en su día me marque. Esta semana, la primera de las dos más exigentes a las que me enfrento, me ha dejado al borde del cansancio. De la frescura física con la que empecé he pasado a la fatiga, también física, ya que mentalmente no ha variado nada, sigo teniendo fe en lo que estoy haciendo. Si es cierto que quizás sea la última vez que siga un plan que me exija tanto, realmente no me merece la pena; pero también es cierto que puedo perder tres meses en el experimento.
Seis días, un solo descanso, el miércoles, 86,300 km. de recorrido.
El lunes, día 03, series (4×1000 + 6×800) para después de calentamiento y enfrentamiento acabar con 12,240 km. en las piernas.
El martes un rodaje de 14,490 km.
El miércoles, día 05, rodaje de 10 kilómetros que, debido a que mañana tocaba descanso, afronto con exigencia.
Y el viernes otra vez series [3x(3000rap+1000lent)], y en esta ocasión sin buenas sensaciones lo que me exigió más trabajo mental.
El sábado, día 08, carrera para abrir boca de 11,500 km.
Y para el domingo dejamos el plato estrella, la tirada larga, que en está ocasión dio para 22,150 km. Las sensaciones han mejorado pero se nota en mis piernas el trabajo acumulado.
Todo sigue su curso. Todo va bien; la alegría, la tristeza son sensaciones separadas en muchas ocasiones por una delgada línea.

1 comentario:

Raúl Rubio dijo...

Con semejante semana no me extraña que acabes molido, muchos kilómetros para las patas.

Un abrazo Satur.