Todo
tiene un principio. Toda historia tiene un comienzo. Siempre, se dice, que la
historia se repite. Y este es el caso, de un comienzo, y de una historia que se
repite. La ilusión y las ganas han vuelto a ser parte de mí. Los primeros pasos
de otro viaje ya están dados.
En
esta ocasión nada hay que impida, al menos de momento, que los entrenamientos
sean llevados casi al pie de la letra. “¿Cuadriculado?”, lo seré, no digo que no,
pero sobre todo seré yo mismo. Siendo yo mismo en cada entrenamiento, vigilando
el resultado diario pero sin obsesionarme; el resultado final es el que
importa. Las derrotas diarias ayudarán a ganar la batalla final.
Ahora lo
importante es ser firmes en los entrenamientos y en creer en lo que se hace.
Barcelona me espera.
1 comentario:
Mucho ánimo y fuerza en esta nueva andadura.
Sabemos que el camino no será fácil, pero eso es precisamente lo que nos impulsa a embarcarnos de nuevo en otra batalla.
Un abrazo.
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