Atrás he dejado ya unas horas de este 2009, esas primeras horas en las que la euforia me hizo ilusionar con nuevas carreras, proyectos o retos, e incluso recuperar los que durante el 2008 deje en la mochila, aquellos que mis zapatillas no llegaron a correr, bien por falta de tiempo, ganas o por alguna lesión inoportuna.
Atrás quedan aquellas horas en las que prometí ser persistente en los entrenamientos programados, en no caer en la desidia o la desgana, y cumplir con todos los deseos.
En mi cabeza bullen infinidad de carreras para este año, pero si soy consecuente (o realista) sé que son muchas, que mi cuerpo no podrá con todas, pero así y todo ilusión que no falte.
Pero aunque sean muchas las pretensiones, si me hice el firme propósito (y este si que lo voy a cumplir) de al menos no fallar a los amigos y acudir a aquellas carreras que he planificado con ellos.
Ser consecuentes con esas personas que en un momento determinado planificaron una carrera y se ilusionaron porque yo les metí el gusanillo o les induje a ello; quizás sea porque me cansan los mal quedas.
¡¡Ay!! que sería de esta vida sin los buenos propósitos.
Atrás quedan aquellas horas en las que prometí ser persistente en los entrenamientos programados, en no caer en la desidia o la desgana, y cumplir con todos los deseos.
En mi cabeza bullen infinidad de carreras para este año, pero si soy consecuente (o realista) sé que son muchas, que mi cuerpo no podrá con todas, pero así y todo ilusión que no falte.
Pero aunque sean muchas las pretensiones, si me hice el firme propósito (y este si que lo voy a cumplir) de al menos no fallar a los amigos y acudir a aquellas carreras que he planificado con ellos.
Ser consecuentes con esas personas que en un momento determinado planificaron una carrera y se ilusionaron porque yo les metí el gusanillo o les induje a ello; quizás sea porque me cansan los mal quedas.
¡¡Ay!! que sería de esta vida sin los buenos propósitos.
4 comentarios:
Constancia en todos los aspectos de la vida y saber siempre ponerse en el lugar de los demás. Defraudar las ilusiones de los otros supone acabar con las nuestras a la larga.
Un beso!
¡¡¡Uffffffffff!!! Acabo de colgarte y miedo me dabas ¡je je je!
Eso está bien no defraudar a los amigos es un buen propósito, otro más importante es el de no defraudarse a uno mismo, a ese me tengo que subir yo.
Como bien dice Sonia, la tal Constantina esa del demonio es la clave.
Getafe, Sevilla, 100 en 24H, lo que venga de más bienvenido sea.
Un saludo, constante.
Sonia: Yo siempre me pongo en su lugar, por eso no defraudo (a los amigos) porque a mí no me gusta que me defrauden.
Abe: Getafe, Sevilla y 100 en 24, CONFIRMADO; estas carreras forman parte de mis propósitos para este año.
Un saludo.
Es bonito tener proyectos, ilusiones, propósitos... y sobre todo, ver que se cumplen es muy satisfactorio :-) Suerte en todos y a disfrutarlos.
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