El domingo tenía una cita. El lugar de encuentro:
San Marcos, donde la pequeña marea naranja del “Nunca correrás solo” se unió a
la gran marea naranja de la 2ª Carrera Solidaria “Corre por la Vida”. Correr
por solidaridad hace que esto merezca la pena.
Y la gran marea naranja inició su marcha, primero lo hicieron los corredores, y minutos después o quizás segundos, los andarines.
Y la gran marea naranja inició su marcha, primero lo hicieron los corredores, y minutos después o quizás segundos, los andarines.
Las zancadas solidarias, compartidas con mis compañeros, con mis amigos, van
recorriendo la margen del río Bernesga, primero una orilla y después la otra, para ir
en busca del otro río, el Torio, donde la ida se convierte en vuelta, y puedes
ver y animar, a los que van por delante y a los que van por detrás. Mis pasos, sus
pasos, todos los pasos, van corriendo esos caminos, esas márgenes, tan
recorridos en tantos entrenamientos, y nos acercan a su meta de esperanza.
"Corre por la Vida". "Vive la vida".
1 comentario:
Bonito espiritu¡¡¡, que bien lo pasaste¡¡¡.
Un abrazo.
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