Del 10 al 21
de marzo
Hoy, la última
entrada de la preparación de Roma, no voy a dejar ni tiempos, ni salidas, o si
estas han sido largas o cortas. Solo decir que han pasado dos semanas, en las
que simplemente he salido a correr, que también he corrido la media de León,
todo con mucha tranquilidad y rodeado de amigos.
Se acerca el
momento para el que he estado entrenando o para el que me he estado preparando.
He entrenado bien, creo que estoy bien, quizás mejor de lo que yo esperaba
cuando empecé esta aventura. Lo que me genera dudas. “¿Cuánto piensas hacer?” me preguntaban el miércoles. “No lo sé, ahora no lo sé”. Y a estas
alturas sigo sin saberlo, y tengo la impresión que tampoco lo sabré hasta el
domingo.
Antes lo tenía
claro, correr y disfrutar de otro maratón. Hoy, después de la media leonesa, de
todas las sensaciones que mi cuerpo recogió, tengo una duda: Sigo con la vieja
idea o me dejo llevar.
Realmente me
gusta esta situación, y ojala sean siempre estas las dudas que me asalten.
Parece mentira
que a estas alturas, y después de cientos de kilómetros, del viento, de la
lluvia, del frío y del calorcillo de estos últimos días, no esté todo hecho.
Vamos a por
Roma. Amigos (y amigas) va por vosotros.
3 comentarios:
Es la magia del Maratón Satur.
Estás atravesando un pico de forma formidable, esas sensaciones son únicas, disfrútalas.
Un abrazo.
Lo tenga que ser será,disfruta del entorno, de la maratón y seguro que recogerás el fruto del trabajo bien hecho.Mucha suerte campeón, un fuerte abrazo.
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