De 15 a 21 de febrero
¡Vaya
semanita!¡Una locura!. Lo de la soledad del corredor de fondo está muy bien,
pero nada mejor que correr en compañía, que compartir carreras y
entrenamientos. Aunque en lo de compartir solo hay un problema, que algunas
veces te sacan del paso. O nos dejamos sacar.
Esta semana me
sacaron del paso, por mucho que lo nieguen. Al principio, en su planteamiento,
lo de siempre: empezar por un rodaje tranquilo (para recuperar), seguir con las
series, continuar con otra salida exigente (en esta ocasión la tirada larga), y
la tirada larga (en esta ocasión carrera, la de Entreculturas). Pero fue llegar
el lunes, día 15, y meternos en
harina para que todo se viniese abajo. El ímpetu de los compañeros de viaje
hizo que me sacasen de lo planeado. “Si
vas tú delante” decía uno de ellos. ¡Mentira!. Yo iba que no era poco. Y
entre ese ir y venir, y decir y no decir, completamos una tirada de 11´720 km.
El martes, seguimos con la exigencia
planificada de las series. 13´080 km. que no estuvo nada mal.
El jueves, día 18, trastocamos el orden y
nos vamos con la tirada larga, 16´880 km. de buenas sensaciones.
Y el domingo, la carrera de Entreculturas,
lo que ya por si implica exigencia, la que da el ponerse el dorsal en el pecho.
Era el remate a una semana de locura.
Una semana en
la que acabé con 51´500 km. en las piernas. Todos ellos compartidos en muy
buena compañía. Subiendo poco a poco.
“Para llegar rápido es mejor andar despacio,
pero siempre y con confianza en la llegada” de H. Schlesinger
1 comentario:
Vamos, la soledad del corredor de fondo está sobrevalorada...sin compañia se hace muuuuuu duro
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